¡Buenos días!
Esta mañana, desayunando, he sabido que mi buitre, Butragueño, sigue existiendo. Y que además sigue siendo tan buena gente como siempre. Todavía recuerdo aquel partido internacional, y no me preguntéis cuál porque ni idea, en el que debutaba en la selección y en los últimos minutos salió al campo y marcó. Nacía así una estrella, queridísima por todos, y además humilde.
Seguro que recordáis ese accidente en una exhibición aérea en Ucrania en julio. Se vieron por televisión imágenes de un niño desesperado sacudiéndose el polvo de su flamante camiseta del Real Madrid.Pues bien, ese niño ha sido buscado por Butragueño y su gente, y hoy llega a España. Dicen que en el hospital el niño preguntaba por su camiseta. Me alegra enormemente que ese delirio por el fútbol sirva al menos para que un niño, desde su tragedia, disfrute de una semana en España, me imagino que rodeado de sus ídolos.
Por cierto, ese de ayer que no encontraba a Makelele (jejejeje): está de baja dos semana por rotura fibrilar. Hierro tiene para tres semanas por una lesión de tobillo y Roberto Carlos Y Ronaldo también están poco bien. ¡Cómo está el Madrid!

¡Buen fin de semana!